Marina y Fernando llevan juntos 11 años y deciden venir a terapia para darle una última oportunidad a su relación.

Tuvimos una sesión conjunta donde exploramos cuales eran los motivos de enfrentamiento, como reaccionaba cada uno a los problemas del día a día y que estrategias para solucionar sus problemas llevaban a cabo.

Hubo bastante tensión durante la hora que duró la sesión pero se fueron contentos y aliviados de haber podido compartir sus problemas con alguien ajeno a ellos.

Durante las dos semanas siguientes, realicé sesiones individuales con cada uno de ellos para saber su historia de vida, relaciones anteriores y cualquier información que fuese confidencial y que quisiesen compartir conmigo.

Una vez terminada la evaluación, me reuní con los dos de nuevo para poner en conjunto la información obtenida tanto de las sesiones como resultados del cuestionario que les pedí que me completaran.


¿Qué le estaba ocurriendo a esta pareja?


Pues bien, Marina y Fernando tenían varios detonantes por los que discutían día tras día: economía familiar, cuidado de sus hijas, tareas del hogar, estrés por el trabajo… Ellos creían que el problema era ese, desacuerdos y diferente manera de pensar.

Sin embargo, el problema no era tanto estos desacuerdos sino la manera en la que estaban gestionándolos. Marina y Fernando habían dejado de ser el equipo y ahora estaban enfrentados.

Yo les pregunté por situaciones del pasado donde tuvieron que enfrentarse a dificultades y de qué manera lograron superarlas. Ambos comentaros que apoyándose mutuamente. Luchaban en el mismo bando pero ahora… ahora luchaban en bandos distintos y uno contra el otro.

¿Cuáles eran las consecuencias? cansancio, desilusión, frustración, apatía. Unas emociones muy negativas para ellos y que llevaban sintiendo años… por eso habían tomado la decisión de separarse.

¿Y cómo ayuda la terapia de pareja en Almería en estas situaciones?

El objetivo fue unir y conseguir que Marina y Fernando lucharan en el mismo bando contra los problemas del día a día. Estuvimos analizando sus discusiones y dándole nuevas perspectivas.

Por otro lado, trabajamos diferentes habilidades que resultan clave a la hora de tener relaciones de pareja satisfactorias. Estas habilidades son: la empatía, la comunicación y la aceptación.

Marina y Fernando se convirtieron en una pareja más asertiva y más empática. Su comunicación también mejoró y volvieron a ser un equipo. Siguieron teniendo desacuerdos y discusiones pero ahora los enfrentaban unidos y apoyándose el uno en el otro.

A veces, los caminos de una pareja se pueden torcer y desviar… eso no significa que esté mal, simplemente, están utilizando unas estrategias equivocadas. El objetivo de la terapia de pareja es reconducirlos y volver a unir sus caminos por medio de estrategias más efectivas.